«Procrastinar es postergar las obligaciones en forma voluntaria y continua, sabiendo que te hace daño».
Así lo explica Mercedes Schnell, psicoterapeuta y especialista en conducta humana.
Refiere que procrastinar es un comportamiento que se caracteriza por la postergación voluntaria, no obligado de una actividad importante.
«Con un propósito definido que sabes además que al no cumplirlas va a tener consecuencias negativas».
Destaca que incluso, sabiendo que si la cumples las consecuencias positivas son mejores pese a que dejas de hacerlo.
El procrastinador, dice Schnell, deja todo para cumplir en el futuro, se excusa y se justifica.
«Porque alega que es poco interesante las cosas que puede hacer y tiene la tendencia que la actividades positivas las hace de mediato».
Lo demás lo deja para el futuro y lo posterga, como sucede con los exámenes a fin de año, que lo va dejando y cuando se acerca la fecha es que lo hace inmediatamente.
Destaca la psicoterapeuta, que al procrastinar la persona tiene un criterio de falta de realidad, porque vive pensando en el futuro.
«En que mañana, pasado mañana o dentro de tres días resolverá el problema y calculas mal», indica Schnell.
Procrastinar: leer un libro en meses
Así como sucede cuando se lee un libro, que se procrastina y luego se quiere leer en poco tiempo, cuando es imposible.
También procrastinar sucede cuando hay malestar o conflicto por una deuda que se tiene y se idealiza el futuro, indica la psicoterapeuta.
«Mañana no va a haber problema si yo hago esto. Es parte del trastorno de la persona, mientras que la normal dice: yo no puedo dejarlo de hacer».
Por lo general, el procrastinador, dice la especialista es una persona que tiene baja autoestima, que siente que no puede hacer cierta actividad.
Y es cuando aparecen frases como «no puedo» o el famoso «tengo», «tengo que ir».
Dice Schnell que tiene que ver con la incapacidad de hacer una tarea por la baja autoestima.
«Dices: yo no sirvo para eso. Lo cual viene acompañado de no tener confianza en uno mismo».
Afirma que si no tienes la autoconfianza, no puedes creerte eficaz, y te equivocarás y si quedarás mal delante de la otra persona.
«El procrastinador constantemente se está cuestionando».
La base teórica de procrastinar es «si le tengo miedo al fracaso es porque creo que no lo voy a lograr y se inventan excusas por no alcanzar el logro».
Dice la especialista que esto tiene que ver con la expectativa del resultado negativo, si lo hace de quedar mal.
El procrastinador se justifica constantemente
Otra aspecto, son las justificaciones y no las realidades, que logran hacer conseguir que se ve que todo está mal.
Así como la falta de estima, que se arrastra de la edad infantil de la persona como niño o de la familia como tal, dice Schnell.
«Porque a veces la familia no ayuda y el ejemplo claro es cuando se le dice a un niño: tú eres tonto, qué te pasa».
Para superar o evitar caer en la procrastinación, Schnell, recomienda que tener objetivos claros y precisos.
«Hay que fijarse en el qué, cuándo y cómo, voy a cumplir los objetivos».
Dice la especialista que hay personas con objetivos parciales, que trabajan en tiempos y lo hacen por descanso.
A diferencia del procrastinador que deja todo a largo plazo y si no traza objetivos parciales.
También sugiere ejercer la planificación de objetivos, «ponle fecha de planificación a la tarea, sobre la que es desagradable. Hazla de primero».
«Tienes que darte cuenta si estás pensando en los tiempos y no puedes pensar en que hay tiempo, si lo puedes hacer, tienes que hacerlo».
También por el pensamiento a largo plazo, surge la procrastinación académica, familiar y personal.
Mercedes Schnell, psicoterapeuta y especialista en conducta humana, pone a disposición su cuenta @mercedeschnell en Instagram para ampliar detalles de este y otros temas de interés.
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