En Turquía con prótesis de juguetes, un proteccionista de animales, los salva del sacrificio.

Hasan Kizil, proteccionista de animales, construye prótesis con bicicletas y juguetes viejos, para los animales con discapacidades en la ciudad de Mardin.

Hasan, dice que no quiere dinero, sino que los animales no sufran ni  sean sacrificados en Turquía.

«Normalmente los veterinarios le dicen a los dueños que es mejor dormir y sacrificar a sus animales», dice Hasan.

«Imagínese tener que morir porque una o las dos piernas están inmóviles», afirma el proteccionista.

La gente llama a Hasan el salvavidas de los animales, porque cada prótesis es fabricada con partes de juguetes y bicicletas.

Insiste que no quiere ser pagado por su trabajo y prefiere dar las prótesis gratis, así sea para niños ricos o pobres, compañeros humanos de los animales.

Para él sólo cuenta una cosa: que ninguno de los animales en estas condiciones en Turquía, tenga que sufrir.

Hasan, es famoso en todo el país, porque lucha contra el maltrato animal en Turquía y ayuda a los animales a recuperar su vida normal.

Un perrito prueba por primera vez sus prótesis y le funcionan. La alegría de verlos correr de nuevo significa todo para él.

Foto: wirestock – www.freepik.es

Turquía y la pandemia

Turquía anhela con recibir nuevamente a turistas y aumentar los ingresos perdidos durante el 2020 por el fuerte confinamiento de la pandemia.

Cafeterías vacías y vendedores ambulantes desesperados en el casco antiguo de la ciudad. Tan desesperados que la ocupación hotelera alcanza entre el 10% y el 20%.

En circunstancias normales, dicen los dueños de hoteles, para esta fecha no podrían sentarse en algunas de las mesas.

Dicen que estarían a tope, con mucho trabajo para atender a los turistas pero ahora las cifras han caído, así como 10 hoteles que han cerrado en el casco antiguo.

En el verano Turquía espera recuperar sus números, pese a la competencia sanitaria con bajos números de contagios que le superan España y Grecia.

Las playas mas concurridas lucen desiertas. Pese a los pronósticos de regresar a una relativa “normalidad”, son pocos los visitantes foráneos.

Turistas de Ucrania y Rusia, se aventuran a visitar Turquía, pese a lo inhóspito.

5 millones de visitantes registró la playa más concurrida durante esta época, versus los 20 millones antes contabilizados antes del inicio de la pandemia.

El ministro de Turismo turco es optimista, con el avance de la vacunación, para el aumento veraneantes para el segundo semestre del año.

Sin embargo, para los hoteleros son más las cancelaciones que las reservaciones, pese a estar listos para recibir a los turistas.

Con información de www.dw.com

Imagen de la portada tomada de: Foto de Fondo creado por rawpixel.com – www.freepik.es

A tu salud…