Si tienes el cabello rizado, sabes lo desafiante que puede ser mantenerlo definido, sin frizz y con un aspecto saludable. Entre los productos comerciales llenos de químicos y el deseo de usar opciones más naturales, muchas personas están descubriendo el poder de la linaza como un ingrediente estrella para el cuidado capilar.

El gel de linaza se ha convertido en un aliado indispensable para quienes buscan rizos perfectos, aportando fijación, hidratación y brillo sin los efectos negativos de otros geles.

cabello rizado
Foto referencial – Foto de Delphine Hourlay

¿Por qué la linaza es un tesoro para tus rizos?

Las semillas de linaza son pequeñas pero poderosas. Contienen una gran cantidad de mucílagos, una sustancia gomosa y viscosa que se libera al cocinarlas en agua. Este mucílago es el secreto detrás de sus propiedades beneficiosas para el cabello rizado:

  • Definición natural: Actúa como un agente fijador suave que ayuda a agrupar los rizos, dándoles forma y estructura sin dejarlos duros o pegajosos.
  • Hidratación profunda: Los mucílagos también tienen la capacidad de retener la humedad, lo que es crucial para el cabello rizado que tiende a ser más seco. Esto ayuda a mantener los rizos suaves y flexibles.
  • Adiós al frizz: Al sellar la cutícula del cabello e hidratar, el gel de linaza es un excelente aliado para combatir el frizz, especialmente en ambientes húmedos.
  • Brillo y suavidad: Las semillas de linaza son ricas en ácidos grasos omega-3, que nutren el cabello, mejoran su elasticidad y le otorgan un brillo saludable.
  • Ingredientes naturales: Al hacerlo en casa, tienes control total sobre los ingredientes, evitando químicos agresivos, alcoholes secantes y fragancias artificiales que pueden dañar tus rizos a largo plazo.

Cómo preparar tu propio gel de linaza casero

Hacer tu propio gel de linaza es sorprendentemente sencillo y económico

Ingredientes:

  • 1/4 taza de semillas de linaza enteras (pueden ser doradas o marrones)
  • 2 tazas de agua filtrada
  • Opcional: unas gotas de tu aceite esencial favorito (romero, lavanda, menta) para aroma y beneficios adicionales, o una cucharadita de algún aceite vegetal (coco, jojoba, ricino) para extra-hidratación.

Instrucciones:

  1. Combina: En una olla pequeña, añade las semillas de linaza y el agua.
  2. Hierve: Lleva la mezcla a ebullición a fuego medio-alto. Una vez que hierva, reduce el fuego a bajo.
  3. Cocina a fuego lento: Cocina a fuego lento, revolviendo ocasionalmente, durante 5 a 10 minutos. Observarás que el agua empieza a espesarse y a tomar una consistencia viscosa similar a la clara de huevo cruda. ¡No dejes que se espese demasiado, ya que será difícil colarlo! Es mejor que quede un poco más líquido al principio.
  4. Cuela: Retira la olla del fuego inmediatamente. Con la ayuda de un colador de malla fina (o una media de nylon/panty, para un colado más eficiente), vierte la mezcla sobre un recipiente de vidrio. Presiona las semillas con una cuchara para extraer todo el gel posible. Cuélalo mientras aún esté caliente, ya que al enfriarse se espesará aún más y será casi imposible.
  5. Añade extras (opcional): Una vez colado y ligeramente templado, puedes añadir unas gotas de tu aceite esencial o aceite vegetal si lo deseas. Mezcla bien.
  6. Almacena: Vierte el gel en un recipiente de vidrio limpio y hermético. Déjalo enfriar completamente antes de tapar y refrigerar.

Consejos de almacenamiento:

  • El gel de linaza casero se conserva en el refrigerador durante aproximadamente 1 a 2 semanas. Si notas un olor extraño o moho, deséchalo.
  • Para prolongar su vida útil, puedes añadir una pequeña cantidad de conservante natural (como vitamina E o un conservante cosmético de amplio espectro, siguiendo las indicaciones del fabricante).
  • También puedes congelar porciones del gel en una cubitera de hielo y descongelar según sea necesario.

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Cómo usar el gel de linaza para rizos perfectos

El gel de linaza es increíblemente versátil y se adapta a diferentes tipos de rizos y necesidades:

  1. Sobre cabello mojado: Este es el método más común. Con el cabello recién lavado y acondicionado, y aún muy húmedo (pero no chorreando), aplica una cantidad generosa de gel de linaza desde la raíz hasta las puntas.
  2. Técnica scrunching: Estruja suavemente los rizos hacia arriba, desde las puntas hacia la raíz. Esto ayuda a que los rizos se formen y a distribuir el producto de manera uniforme.
  3. Definición con dedos (finger coiling): Para rizos más definidos, puedes tomar pequeños mechones de cabello y enrollarlos alrededor de tus dedos.
  4. Secado: Deja secar el cabello al aire libre para unos rizos más suaves y naturales. Si tienes prisa, usa un difusor con aire frío o tibio a baja velocidad para minimizar el frizz.
  5. Romper el cast: Una vez que tu cabello esté completamente seco, es posible que sientas un ligero «cast» o una capa crujiente (esto es una señal de buena fijación). Simplemente estruja suavemente los rizos con tus manos o con unas gotas de aceite ligero para romper este cast y revelar unos rizos suaves, definidos y sin frizz.

Frecuencia de uso:

Puedes usar el gel de linaza cada vez que laves tu cabello, o para refrescar tus rizos entre lavados. Simplemente humedece un poco tu cabello y aplica una pequeña cantidad de gel.

El gel de linaza es una alternativa natural, económica y efectiva a los geles comerciales. Experimenta con las cantidades y métodos de aplicación para encontrar lo que mejor funciona para tus rizos.

¡Prepárate para lucir un cabello rizado espectacular, saludable y lleno de vida! ¿Estás listo para darle una oportunidad a este maravilloso gel?

Fuente: glamour

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