El síndrome de ovario poliquístico es un trastorno hormonal que sufren las mujeres. Aunque muestra señales que son fácilmente identificables para un médico, la mayoría de quienes lo sufren no son diagnosticadas. El ginecólogo Jesús Castellano, especialista en fertilidad y reproducción asistida, nos explica cómo reconocer sus principales síntomas.

Aunque es una enfermedad que no se cura, su diagnóstico y tratamiento temprano puede evitar complicaciones a futuro. Normalmente aparece en la pubertad, por lo que sería ideal identificar sus señales a esta edad. “Si es así, esa adolescente debe ser llevada a un ginecólogo o a un endocrinólogo para su evaluación”, recomendó Castellanos.

Hasta el momento las causas de su aparición son desconocidas, pero hay varios factores que pueden influir. “El primero es el exceso de insulina en el organismo. Cuando las células se vuelven resistentes a la acción de la insulina, los niveles de azúcar pueden aumentar en sangre. Esto provoca una producción elevada de andrógenos”, explicó.

“Otro factor conocido – prosiguió – es el alto nivel de andrógenos producidos por algunos ovarios, lo que genera acné e hirsutismo en las afectadas”.

El síndrome de ovario poliquístico y sus señales

Las manifestaciones que presenta este síndrome son variadas, pero hay algunas que pueden encender las alarmas incluso de quienes no son expertos:

. Fallas ovulatorias. Hay casos más severos y otros menos, pero en promedio lo común es que haya de cinco a seis fallas de ovulación en el año. No se sabe cuándo van a ocurrir las faltas.

. Trastornos de la regla. Lo más común es que los ciclos sean atípicamente lejanos, de más de 30 días.

. Androgenismo o masculinización del cuerpo por exceso de hormona masculina.

. Obesidad

“La masculinización del cuerpo es la más visual de todas estas señales”, explica el especialista.

“La paciente va a perder cabello, se le va a caer más de lo normal. Hay más seborrea en su piel y en el cuero cabelludo. Hay presencia de vellos faciales más oscuros, más gruesos o en mayor cantidad de lo que pareciera común. Habrá vellos en la areola, en la zona central del abdomen, y puede que también en el pecho o en la espalda. Y habrá tejido graso acumulado en la espalda, parte posterior del brazo o en el abdomen”.  

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“La mayoría de las pacientes que presentan esas señales no tienen el diagnostico. Por lo general, van a la consulta porque tienen un trastorno de la regla, sangrados anormales o el endometrio grueso. Hay mujeres de 30 y hasta 40 años que tienen estos síntomas a las que nunca les han dado un diagnóstico de ovario poliquístico”, señaló.

Tratamiento y calidad de vida

Aunque el síndrome de ovario poliquístico es una condición con la que deberán vivir estas pacientes, existen tratamientos que mejoran su calidad de vida.

“Con el tratamiento adecuado la paciente puede mejorar muchísimo”, asegura el Dr. Castellanos. “En el tratamiento se aplican bloqueadores de andrógenos. También se están usando ciertas dosis semanales de vitamina D”, indicó.

“Otra de las cosas que hay que controlar desde el principio es la alimentación, que es muy importante para estas pacientes. No es cualquier dieta, no es la dieta de moda, es una dieta para acelerar el metabolismo. El ejercicio también va a ayudar mucho para que la paciente se mantenga en el peso adecuado”, explicó.

“Es fundamental mantener el metabolismo catabólico externamente. Esto ayudará a que el ovario se mantenga en catabolia y no en anabolismo, que afecta por el tema de la insulina”, añadió.

“Si cumple su tratamiento la paciente empieza a mostrar resultados en un mes. Mejorará la seborrea en piel y cuero cabelludo, la caída del cabello, mejorará el peso corporal y hasta el trastorno de insulina”, aseguró el Dr. Jesús Castellanos.

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