El pie tiene 28 huesos, 30 articulaciones y más de 100 músculos, ligamentos y tendones. Estas estructuras trabajan juntas para realizar 2 funcionalidades primordiales: soporte de peso y propulsión. Además, debería ser flexible para ajustarse a áreas irregulares y quedar estable.
Los inconvenientes usuales del pie serian fascitis plantar, juanetes, pies planos, espolones en el talón, dedo del pie en martillo, metatarsalgia, dedo en garra y neuroma de Morton.
Anatomía del pie
Existen 3 secciones: el antepié, el mediopié y el retropié. Hay huesos, articulaciones, músculos, tendones y ligamentos en todas estas secciones.
Huesos
Antepié
- Falanges: Estos son los dedos de los pies. Conforman un total de 14 huesos: 2 para el dedo gordo y 3 para todos los otros 4 dedos.
- Metatarsianos: Estos son 5 huesos largos que se prolongan a partir de la base de cada dedo del pie hasta mediopié.
- Huesos sesamoideos: Son 2 huesos pequeños, de forma ovalada debajo del primer metatarsiano en la parte inferior (superficie plantar) del pie.
Mediopié
El mediopié tiene 5 huesos de forma irregular denominados tarsos. Juntos, los tarsos conforman el arco del pie. El arco juega un papel clave en la carga de peso y el equilibrio del pie. Dichos huesos integran:
- Navicular
- Cuboide
- Cuneiforme medial
- Cuneiforme intermedio
- Cuneiforme lateral
Retropié
- Calcáneo: También conocido como el hueso del talón. Su funcionalidad primordial es transferir la mayoría del peso corporal de las piernas al suelo.
- Astrágalo: Este es el hueso que está entre el calcáneo y los dos huesos de la parte inferior de la pierna (la tibia y el peroné). Ayuda a transferir el peso y la presión por medio de la articulación del tobillo.
Articulaciones
Las articulaciones son donde se encuentran 2 huesos. En los pies, cada dedo gordo tiene 2 articulaciones: metatarsofalángica articulación en la base del dedo y el interfalangeal junta justo encima de ella.
Los otros 4 dedos poseen 3 articulaciones cada uno: la articulación metatarsofalángica en la base del dedo del pie, la articulación interfalángica proximal en el centro del dedo y la articulación falángica distal más cercana a la punta del dedo.
Musculatura
Los músculos que controlan los movimientos del pie empiezan en la parte inferior de la pierna y permanecen ligados a los huesos del pie con tendones.
Estos son los principales músculos que facilitan el movimiento:
- Tibial posterior: El músculo que sostiene el arco del pie
- Tibial anterior: El músculo que posibilita que el pie se mueva hacia arriba
- Peroneus longus y brevis: Los músculos que controlan el movimiento en la parte exterior del tobillo
- Extensores: Los músculos que levantan los dedos de los pies para que sea posible dar un paso
- Flexores: Los músculos que estabilizan los dedos de los pies y los rizan debajo
Tendones
Los tendones son tejidos conectivos fibrosos que unen los músculos a los huesos. Hay 3 tendones primordiales que ayudan a facilitar el movimiento del pie, incluida la flexión (flexión hacia adelante) y la dorsiflexión (flexión hacia atrás):
- Tendón de Aquiles: Este es el tendón más importante del pie que se prolonga desde el músculo de la pantorrilla hasta el talón.
- Tibial posterior: Este tendón une el músculo de la pantorrilla a los huesos en el interior del pie y soporta el arco del pie.
- Tibial anterior: Este va desde el hueso externo de la parte inferior de la pierna hasta los tarsos y el primer metatarsiano que permite la dorsiflexión.
Ligamentos
Los ligamentos son tejidos conectivos fibrosos que conectan hueso con hueso. Los ligamentos primarios son:
- Fascia plantar: Este es el ligamento más extenso que va desde el talón hasta los dedos de los pies para conformar el arco.
- Calcalneonavicular plantar: Este es un ligamento que conecta el calcáneo con el astrágalo. Su funcionalidad es apoyar la cabeza del astrágalo.
- Calcaneocuboide: Este es el ligamento que conecta el calcáneo con los huesos del tarso. Ayuda a la fascia plantar a mantener el arco del pie.
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Problemas comunes en los pies
Fascitis plantar
Es causada por microdesgarros en el tejido fibroso grueso en la parte inferior del pie, principalmente debido al estiramiento excesivo. Los síntomas son dolor en el talón y el arco que constantemente empeora por las mañanas.
Juanetes
Un juanete es una protuberancia ósea en el borde interior del pie o en el lado del dedo meñique. Los juanetes se forman cuando los huesos del pie se desalinean, comúnmente debido al uso de zapatos que no se ajustan bien o que aprietan los dedos de los pies con fuerza.
Pies planos
Ocurre cuando el arco del pie se endereza, tan del todo que toda la suela entra en contacto con el piso.
Los pies planos tienen la posibilidad de provocar dolor en la zona del mediopié, así como hinchazón del tobillo y el arco. El desequilibrio además puede ocasionar dolor de cadera, rodilla o espalda baja.
Espuelas de talón
Uno de los más frecuentes es el desarrollo de un incremento excesivo óseo denominado espolones en el talón que ocasionan dolor severo al pararse o caminar. También conocidos como espolones calcáneos, los espolones del talón son más frecuentes en personas que poseen fascitis plantar, pies planos o arcos altos.
Dedo del pie en martillo
Se desarrollan gracias a un desequilibrio en los músculos, tendones o ligamentos que mantienen los huesos rectos. Al igual que con los juanetes, el dedo en martillo comúnmente se forma como consecuencia del uso de zapatos mal ajustados, aunque también podría ser provocado por un trauma o ciertas patologías.
Metatarsalgia
Es un dolor debajo de la bola del pie (parte donde los dedos se unen al resto del pie). Constantemente es el resultado de la presión causada por zapatos de tacón alto o de afecciones como artritis, compresión nerviosa, fracturas o desgarros en los ligamentos que sostienen la bola del pie.
Dedo en garra
Un dedo en garra es una deformidad en la que un dedo del pie se dobla hacia abajo desde las articulaciones medias y, algunas veces, inclusive puede curvarse debajo del pie por completo.
Neuroma de Morton
Este es un inconveniente común en el cual la compresión de un nervio en la bola del pie causa ardor, hormigueo y dolor cerca del tercer y cuarto dedo.
Fuente: mejorconsalud
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30 años. Actualmente tesista de la Licenciatura en Física, mención Física Médica. 9no semestre aprobado. Redactor en mis tiempos libres. ¡Me gusta aprender e innovar en todo! Amante del cine y buen café.
