La mundialmente famosa fábrica de juguetes estadounidense Mattel, lanzó una muñeca Barbie, en honor a la vacunóloga británica Sarah Gilbert.

Una Barbie atípica nacida en tiempos de pandemia, que no es médico ni enfermera, si no vacunóloga. 

El modelo se inspira en Sarah Gilbert, la científica británica que desarrolló la vacuna de Oxford de Astrazeneca.

Gilbert, espera que la muñeca Barbie en su honor, muestre a las niñas profesiones que quizás no conozcan.

«Creo que es importante mostrar a los niños y jóvenes, las opciones que tienen a su alcance, porque si no sabes lo que hay, no será una carrera que vayas a emprender».

Gilbert, es una de las esas mujeres que fabricante de juguetes Mattel ha distinguido como modelo de conducta contra la covid-19.

Aunque jugueterías en Alemania no podrían venderlas aún, este tipo de Barbies se ofrecen con diferentes aspectos y profesiones.

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Barbie ahora es multifácetica

Barbie, también puede ser un atleta, tal vez una que sufre un golpe del destino y ahora solo puede estar en silla de ruedas, dice la vendedora.

Para la vendedora de la tienda en Alemania, las muñecas se han vuelto más inclusivas en los últimos años, un paso que considera necesario.

Mientras el fabricante de juguetes propone para las niñas, muñecas que no tengan que enfrentar las críticas de Barbie, crea una imagen realista de la mujer.

Pelo rubio, pecho generoso, esa es la imagen típica de Barbie, con las piernas largas, pero ahora es más curvilínea y sus proporciones son diferentes, es una propuesta distinta.

También puede ser astronauta o piloto, o quizás activista, como la primera dama de la derechos civiles en Estados Unidos.

Fuera de la tienda, la gente tiene opiniones divididas sobre la apuesta de la juguetera por ser más diversas y su nueva serie pandémica.

Algunos dicen que es marketing para hacer dinero, pero otros consideran que se abre el paso para deshacerse del ideal de belleza la típica Barbie.

También alegan que ayudan a tener una mejor muñeca, como la vacunóloga y no los otros clichés de siempre.

«Creo que es fundamental mostrar que las mujeres también pueden ocupar puestos importantes», destaca Gilbert.

Porque ofrece mujeres que no se diferencian en absoluto de puestos reales de trabajo.

«En las ciencias biológicas hay muchas mujeres y hay una necesidad de estudiar en esa área, pero solo los niveles más altos la profesión hay un predominio de hombres», indica la vacunóloga.

Quien espera que esto cambie en los próximos años y se fomenten estos estudios desde una edad temprana.

Con información de www.dw.com

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