La salud global se encuentra bajo la atenta mirada de los expertos ante la aparición de una enfermedad misteriosa en la República del Congo. El doctor Rafael Orihuela, epidemiólogo y ex ministro de salud, nos ofrece su perspectiva sobre este brote que ha generado preocupación en la Organización Mundial de la Salud debido a sus características aún desconocidas. En los últimos tres meses, aproximadamente 1300 personas han enfermado y lamentablemente, 50 han fallecido.
El doctor Orihuela señala que esta situación representa la aparición en humanos de una enfermedad causada por un virus que previamente circulaba en la naturaleza, posiblemente en animales como aves. Esta adaptación de un virus animal al ser humano evoca recuerdos de epidemias pasadas, como la llegada del SIDA, cuyo origen también se rastrea a virus simios que se adaptaron a los humanos. La aparición de esta nueva enfermedad, especialmente en África, donde históricamente han surgido numerosas enfermedades transmisibles, subraya la importancia de la vigilancia epidemiológica.

Imagen de elisemertens89 en Pixabay
Características de la enfermedad:
- Origen zoonótico: Se sospecha que el virus ha pasado de animales a humanos, aunque la especie animal específica aún no se ha determinado.
- Similitud con el pasado: El doctor Orihuela establece un paralelismo con el origen del VIH, sugiriendo un posible patrón en la adaptación de virus animales a humanos.
- Mapa de riesgo: Desde hace décadas se trabaja en la identificación de animales que podrían ser portadores de virus peligrosos para los humanos, aunque aún no se han identificado los culpables específicos en este caso.
- Necesidad de vacuna: Ante la incertidumbre sobre la evolución del virus, el desarrollo de una vacuna se considera fundamental, aunque el proceso no es sencillo.
Desentrañando las manifestaciones de la nueva enfermedad
Las manifestaciones de esta enfermedad aún están bajo investigación, pero se ha observado que los síntomas iniciales pueden parecerse a los del paludismo o infecciones virales como el Ébola. Se están descartando causas como el consumo de agua envenenada, meningitis o malaria, mientras se considera la posibilidad de que sea una fiebre hemorrágica. Es importante destacar que, aunque la propagación ha sido rápida, la tasa de mortalidad inicial es relativamente baja, con 50 fallecidos entre 1300 casos.
El doctor Orihuela explica que el período de incubación es de aproximadamente 21 días. Después de este tiempo, los afectados pueden experimentar malestar general, dolor, escalofríos y fiebre. Aunque el virus no tiende a atacar rápidamente el sistema nervioso o respiratorio, aquellos casos en los que la respuesta inmunológica se ve comprometida pueden resultar en desenlaces fatales. La preocupación radica en la posibilidad de que el virus mute y se vuelva más agresivo en su adaptación al ser humano.
Actualmente, la comunidad científica se enfoca en determinar el mecanismo de contagio, lo cual es crucial para mitigar la propagación. Los roedores, dada su cercanía a los humanos y su historial como portadores de enfermedades zoonóticas, son uno de los principales focos de investigación. El doctor Orihuela menciona ejemplos como la fiebre hemorrágica venezolana, donde ciertos tipos de roedores son los transmisores. La vigilancia y la investigación continúan para comprender y controlar esta nueva amenaza para la salud pública.

Cuenta con una valiosa trayectoria en el mundo editorial para productos impresos y digitales participando en los procesos de corrección, edición e investigación.