A pesar de que hay fuentes y casos que evidencian de los peligros del biopolímero, sigue habiendo personas que se los inyectan, sin medir las consecuencias que esta sustancia, cuasi plástico, tenga en su cuerpo y/o organismo.
La octora Natalia Solórzano, cirujano plástico, miembro de la Sociedad Venezolana de la Cirugías Plástica, conversó con María Laura García sobre las enfermedades por biopolímeros y el aumento de complicaciones por implantes de esta naturaleza.
Peligros de los biopolímeros
Aun cuando en la actualidad hay muchas personas lidian con los efectos secundarios de los biopolímeros, otro grupo de personas piden implantarse biopolímeros.
Señala la Dra. Solórzano que esta sustancia «es un plástico que te estás inyectando en tu cuerpo para dar volumen en un zona donde lo tienes».
Afirma que las zona de la cara, glúteos, pectorales, son las zonas donde más se han inyectado este tipo de «materiales». Pero estos «te hacen daño desde el momento en que te los inyectas». No obstante, los pacientes más ingenuos creen que no habrá daños porque no ven infección alguna, o edemas, etcétera.
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El sistema inmune ante los biopolímeros
Explica la especialista que aunque el cuerpo de buenas a primeras no somatiza la colocación de estos materiales, los peligros del biopolímero quedan latentes.
«Tu tienes allí un producto que no es biológico, y tu cuerpo que es profundamente sabio,te activa tu sistema inmune, 24/7»; pero estará así durante el tiempo que estén los implantes en el cuerpo. Las consecuencias, precisa la experta, es que se dan reacciones a distancia. «Unas alergias que nunca habías tenido», entre otros.
Diagnóstico del peligro
Los peligros del biopolímero son inevitables, solo que cuando aparecen síntomas de alguna patología o reacción alérgica, no se los relaciona con los implantes.
En este sentido, afirma Solórzano que los pacientes con biopolímeros requieren de un equipo interdisciplinario para tratarlos, cuando se dan los efectos secundarios. «No es nada más el cirujano plástico». Agrega que el tratamiento como tal para erradicar los peligrosos efectos de los biopolímeros es su retiro.
«Tiene que estar un cirujano plástico, un reumatólogo, el inmunólogo; el infectólogo, si hay un caso de infección. Entonces, no es fácil dar con el diagnóstico»
Uno de los peligros de los biopolímeros: su retiro
La complejidad que entraña la eliminación total del organismo de una persona inyectada con biopolímeros es bastante, ya que no se consigue eliminar todos los residuos de biopolímeros del organismo.
«Es muy difícil retirarlo un 100 %; pero es ahí donde tu tienes que sopesar, qué prefieres, si salud o tener ese material dentro de tu cuerpo»
En su experiencia como cirujano plástico, Solórzano señala que sí hay pacientes que optan por retirar los implantes, reducir los peligros de los biopolímeros, aun cuando esta operación deje algunas cicatrices. Pues, priorizan la salud antes que la estética.