El uso de la copa menstrual cada vez es más frecuente y se está extendiendo en las mujeres. Si te has planteado o has pensado en probarla lo mejor es conocer algunos detalles y los datos que confirma que es segura, eficaz y sin riesgos para la salud ya que hay muchas dudas referente a este tema.
¿Qué es la copa menstrual?
La copa menstrual, es conocida como la copa para la regla o copa vaginal, es un recipiente de silicona médica que se introduce en el centro de la vagina (igual que un tampón) a lo largo de la menstruación, adaptándose a los muros vaginales independientemente del desplazamiento que hagamos, y recoge todo el flujo en el centro de la copa. Puedes llevarla hasta 12 horas sin ningún tipo de preocupaciones. Y tiene un uso ilimitado, debido a que la puedes quitar y situar tantas veces como quieras.
La copa menstrual en un artículo de limpieza íntima, a modo de copa, que se introducen en la vagina recoge el flujo menstrual que se desprende en los días de menstruación
Es otra opción a las toallas sanitarias y tampones que suelen ser bastante molestos constantemente, y suponen un procedimiento seguro e indoloro para recoger la sangre que desprende nuestro útero, de forma que no sobresalga y logre provocar manchas en nuestra ropa
Se usa diariamente a lo largo de todo el periodo. Sí, TODO el periodo, por lo cual la puedes utilizar por la noche sin inconvenientes, puedes descansar tranquila.
Después, la esterilizas con agua hirviendo y la guardas en su bolsita hasta tu siguiente menstruación. Con ella eliminas de por vida los tampones, las compresas, los protectores cotidianos, los olores, las manchas, las pérdidas, las preocupaciones.
Lee también… Resequedad vaginal por anticonceptivos e hipertensión arterial
Las principales ventajas de la copa menstrual
- La copa recoge el flujo en vez de absorberlo como realizan los tampones, por lo cual no deja restos de fibras y, por consiguiente, no crea alteraciones en el ámbito vaginal natural.
- Al ser de silicona médica o TPE, es bastante suave y flexible, en consecuencia no araña ni seca los muros vaginales.
- Da una tranquilidad de hasta 12 horas sin tener que cambiarla una y otra vez (según el flujo de cada mujer).
- Con el mantenimiento conveniente, su tiempo de vida es de entre 10 y 15 años y su costo es bastante accesible.
- No araña ni reseca los muros vaginales y no altera la flora vaginal
- Es muchísimo más ecológica que los tampones y las toallas sanitarias. Una copa se usa ilimitadas veces sin crear ni un solo residuo, de manera con ella contribuyes a conservar el medio ambiente.
- Las copas además podrían contribuir a prevenir inconvenientes provocados por la utilización de las toallas sanitarias, como la candidiasis (producida por el ambiente cálido y húmedo que crea una compresa) y la cistitis.
- No absorben sino que recogen la sangre, de esta forma tampoco absorben la mucosidad vaginal con lo cual no resecan y no se altera la flora bacteriana natural del área.
¿Cómo saber mi talla de copa menstrual?
- Pequeño –Talla S : Si eres menor de 18 años y no has tenido sexo con penetración.
- Tamaño medio –Talla M : Si eres menor de 30 años y no has tenido ningún parto vaginal (también si eres menor de 18 años sin embargo ya has tenido colaboraciones sexuales).
- Grande – Talla L : Si eres más grande de 30 años (hayas parido o no) y si has tenido parto vaginal (independientemente de tu edad).
Aun cuando la mayor parte de la marcas poseen 2 tallas; pequeña y grande. Todos dichos tamaños están designados a un grupo de mujeres con determinadas propiedades.
- Talla I: Para damas que jamás hayan tenido un parto vaginal o cesárea.
- Talla II: Para damas que hayan tenido parto vaginal o tengan un flujo exuberante.
(Este es el caso de las copas menstruales ama cup)
¿Cuál es mi talla de copa si acabo de dar a luz?
Si acabas de dar a luz, tu suelo pélvico está en proceso de volver a la normalidad. No desesperes y ejercítalo de forma suave y constante para que vuelva a su funcionalidades de constantemente. Comúnmente se aconseja usar la talla L luego de haber dado a luz debido a que inevitablemente el canal vaginal se ensancha al haber dado paso a tu asombroso bebé.
No obstante, si has tenido una cesárea sin dilatación y eres menor de 30 años, en un inicio te correspondería todavía la talla M.
¿Cómo se coloca la copa menstrual?
- Con el paso del tiempo, ponerte y quitarte la copa es algo que resultará bastante sencillo y tendrás la posibilidad de hacer casi sin pestañear, empero las primeras veces puede ser un poco incómodo. Es viable además que al inicio no acabe de sellar a la primera y tengas que volver a colocarla o usar protectores diarios hasta sentirte completamente confiada. Para ayudarte a realizarlo de manera más inmediata y segura, te contamos cuáles son todos los pasos a continuar:
- Lávate las manos con jabón y aclara con agua la copa menstrual.
Es fundamental estar relajada, así que busca una postura en la que estés cómoda. Podría ser sentada en el inodoro o con una de las extremidades apoyada hacia arriba
- Presiona la copa con el dedo índice y el pulgar para doblarla, realizando una forma un poco parecida a un tampón. Al introducirla en el centro de la vagina, aspira colocarla lo más arriba viable, continuamente asegurándote de que puedas tocar la base de la copa con los dedos.
- Al soltar, los extremos de la copa menstrual se colocarán contra el muro vaginal, realizando un sello para que la sangre no salga y se recoja dentro del dispositivo.
- Una vez colocada, gira delicadamente la copa agarrándola a partir de la punta, así, se eliminará cualquier pliegue que haya podido permanecer. Además puedes revisar que está bien sellada recorriendo la base de la copa con el dedo: si tiene una forma ovalada uniforme, supone que está colocada de manera correcta.
- Puedes llevar la copa puesta a lo largo de un mayor de 12 horas de manera segura, además para reposar. Todavía de esta forma, si tu regla es exuberante es viable que tengas que vaciarla un poco previamente para asegurarte de que no haya fugas.
Video por: OrganiCup
¿Cómo retirar la copa de forma sencilla?
Para que te dé más seguridad, la primera vez puedes quitarte la copa menstrual en el bidé o en la bañera, así no tendrás miedo a manchar ni a que se caiga en el inodoro. Una vez estes segura de cómo se retira, seguramente te sentirás más cómoda al hacerlo sentada. Para quitarla, presiona con un dedo la base de la copa -o inclínala hacia un lado- para romper el sello creado contra las paredes de la vagina. Notarás que se mueve con facilidad, y lo que tienes que hacer es estirar suavemente hacia fuera.
Después de vaciarla en el inodoro, y antes de volver a colocarla, solo es necesario limpiarla con agua corriente, pero si vas a guardarla hasta la siguiente menstruación, sí debes esterilizar bien la copa previamente. Para ello, lo más habitual es sumergir la copa en agua hirviendo durante 6 o 7 minutos, evitando que toque las paredes del recipiente, y dejar que se seque al aire.
Desventajas de la copa menstrual
Así como este componente puede ser ventajoso en varios escenarios, en otros no tanto. en un análisis llevado a cabo en Kenia, se vio que a veces, las jóvenes (de 14-16 años de edad) inicialmente tenían accidentes al intentar utilizar o retirar la copa menstrual: se les caía en el inodoro, se les perdían o de forma directa se les dañaban.
La talla cambia según la etapa de cada dama
Cada mujer es distinta, y por esa razón hay diversas tallas de copas menstruales. La medida dependerá de la edad, condición física, la porción del flujo o si ha tenido hijos por parto natural o no. El problema es que en varias ocasiones estas especificaciones no resultan ser tan exactas.
La copa menstrual no es bastante fácil de colocar las primeras veces
Aun cuando la manera en la que se pone es semejante a la del tampón, las primeras veces puede ser un poco incómodo ubicarla de manera idónea. Además, si no se sitúa de manera correcta, puede haber peligro de goteos incómodos. Se debe tener mucha paciencia para aprender a colocarla, sin embargo lo bueno es que una vez se consigue, todo se comienza a volver muchísimo más sencillo.
Precio de inversión
Como mencionamos previamente, las copas menstruales no son de lo más económico en el mercado con respecto al costo de otros productos clásicos. Esto se debería a la calidad de diseño y materiales. Sin embargo, es una inversión que puede recuperarse en pocos meses y que comparado con la inversión mensual o anual en tollas sanitarias vendría siendo más económico.
Cambiar y lavar la copa menstrual
La copa menstrual es reutilizable y debería cambiarse luego de definido tiempo. Esto incluye lavarla con agua y jabón neutro. El problema es que, si no estás en el hogar, este proceso puede volverse difícil. Para evitarlo, puedes cambiarla antecedente de salir de vivienda y lavarla ahí mismo y no en un espacio público.
Requiere más grandes cuidados de aseo
Cada mes, cuando haya culminado tu periodo menstrual, se debería desinfectar. Esto se consigue poniéndola a hervir en agua a lo largo de 5 min, para esterilizarla y eludir peligros. Además, cada cambio necesita de buena limpieza en las manos para manejarla apropiadamente y prevenir alguna infección interna.
Incomodidad al extraerla
Este recipiente funciona por sellado al vacío. Varias mujeres no saben que se necesita pellizcar la parte baja del producto para romper el vacío que crea. De otro modo, la vivencia al utilizarla va a ser incómoda.
Aprobación sanitaria
En ciertos lugares, algunas marcas de copas menstruales no cuentan con registro sanitario frente a las autoridades que corresponden. Es primordial revisar su calidad, los materiales de construcción y efectos colaterales que logren crear y, más relevante todavía, que cuenten con la aceptación fundamental para no afectar la salud de quien las usa.
Fuente: sabervivirtv
Imagen destacada por: Foto de Flores creado por freepik – www.freepik.es
