Las enfermedades cardiovasculares, como la hipertensión, continúan siendo la principal causa de muerte en el mundo, superando a cualquier otra condición. Es una batalla constante que requiere tu atención diaria, no solo en un mes o un día dedicado al corazón. Este panorama subraya la urgencia de adoptar medidas preventivas efectivas, ya que el deterioro de tu salud cardíaca a menudo avanza sin síntomas evidentes hasta que es demasiado tarde.

La buena noticia es que la mayoría de los factores de riesgo son modificables y están bajo tu control. Tienes el poder de intervenir en tu estilo de vida para asegurar que tu corazón mantenga su función óptima por más tiempo. Debes asumir un rol proactivo en tu salud, controlando elementos básicos que no requieren necesariamente medicación, sino cambios de hábito sencillos.

hipertensión

Imagen de Gerald Oswald en Pixabay

Factores de riesgo que debes controlar

Existen varios elementos que contribuyen de manera significativa al deterioro de la salud cardiovascular. Identificarlos es el paso esencial para detener el curso de la enfermedad.

La hipertensión arterial es el principal enemigo, una condición que afecta a una gran parte de la población adulta, muchas veces sin saberlo. El sedentarismo, la obesidad y una dieta rica en grasas y azúcares también son grandes aliados de las enfermedades cardíacas. El estrés crónico es otro factor que no debe ser subestimado en la vida diaria.

Chequeo básico y simple

No tienes que esperar a tener síntomas para preocuparte por tu corazón. La detección temprana se basa en chequeos muy simples que puedes realizar periódicamente.

  • Mide tu presión: Es la medida más sencilla. Acude a cualquier centro de salud o farmacia para tomarte la presión arterial. Si está alta, busca atención médica, sin justificarlo con excusas temporales.
  • Controla tu peso: Pésate y compáralo con tu peso ideal. Bajar de peso es una medida preventiva fundamental para reducir la tensión en tu sistema circulatorio.
  • Exámenes de sangre: Hazte un laboratorio sencillo que incluya glicemia, colesterol y triglicéridos. Es crucial saber cómo están tus grasas y tu azúcar en sangre.

Lea: Disfunción eréctil… ¡Revise su corazón!

Cambia tus hábitos, no solo la pastilla

La mejor prevención se realiza a través de un estilo de vida consciente que impacte directamente en tu bienestar cardiovascular.

Hoy en día, el adulto joven debe evaluarse periódicamente, no solo los mayores de 70 años. Prioriza el ejercicio cardiovascular (caminar, natación, bicicleta) sobre el ejercicio de fuerza. Finalmente, evita el hábito de fumar, que sigue siendo uno de los mayores destructores de la salud arterial.