El magnesio es un mineral esencial para el buen funcionamiento del organismo, ya que participa en más de 300 reacciones bioquímicas que regulan procesos vitales como la producción de energía, el metabolismo de la glucosa, la síntesis del ADN, la salud de los huesos, el ritmo cardíaco, el equilibrio del sistema nervioso y el sistema inmunitario.

Sin embargo, según los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos, la mitad de la población no ingiere la cantidad adecuada de magnesio a través de los alimentos, lo que puede provocar síntomas como pérdida de apetito, fatiga, debilidad, calambres, entumecimiento, hormigueo o problemas de sueño. Además, algunas personas tienen un mayor riesgo de sufrir una deficiencia de este mineral, como los adultos mayores, los diabéticos, los que padecen enfermedades gastrointestinales o los que son dependientes del alcohol.

Por eso, muchas personas optan por tomar suplementos para complementar su dieta y obtener los beneficios de este mineral. Pero ¿cuál es el mejor momento del día para tomar magnesio? ¿Es mejor por la mañana o por la noche? La respuesta depende de los objetivos que se persigan con la suplementación, ya que este mineral puede tener diferentes efectos según la hora del día en que se consuma.

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Beneficios de tomar magnesio por la mañana

Tomar magnesio por la mañana puede ser una buena opción para mejorar los niveles de energía y reducir la fatiga durante el día, ya que interviene en el metabolismo de la glucosa y la producción de ATP, la molécula que almacena y transporta la energía en las células. Además, puede tener efectos positivos en el control del azúcar en la sangre, lo que puede beneficiar a las personas con diabetes o resistencia a la insulina.

Otro beneficio de tomar magnesio por la mañana es que puede ayudar a prevenir o aliviar los calambres musculares, ya que permite la relajación muscular y evita las contracciones involuntarias. Esto puede ser útil para las personas que practican ejercicio físico o que sufren de calambres nocturnos.

Beneficios de tomar magnesio por la noche

Tomar magnesio por la noche puede tener un efecto relajante y mejorar la calidad del sueño en personas con insomnio o dificultades para dormir, ya que ayuda a calmar el sistema nervioso y a regular los niveles de melatonina, la hormona que induce el sueño. Además, puede favorecer un sueño más profundo y reparador, lo que se traduce en una mejor salud física y mental.

Otro beneficio de tomar magnesio por la noche es que puede contribuir a la salud cardiovascular, ya que regula el ritmo cardíaco, reduce la presión arterial y previene la formación de coágulos en el torrente sanguíneo. Esto puede ser importante para las personas que sufren de hipertensión, arritmias o enfermedades cardíacas.

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¿Cómo tomar magnesio?

La cantidad diaria recomendada varía según la edad, el sexo y el estado de salud de cada persona, pero en general se sitúa entre 310 y 420 miligramos al día para los adultos.

El magnesio se puede obtener a través de los alimentos, especialmente de los vegetales de hoja verde, los frutos secos, las semillas, los cereales integrales, las legumbres, el chocolate negro y el agua mineral.

Sin embargo, si se opta por tomar suplementos de magnesio, es importante elegir el tipo adecuado según las necesidades de cada uno, ya que existen diferentes formas con distintas propiedades y efectos. Algunos de los tipos más comunes son el citrato de magnesio, el glicinato de magnesio, el cloruro de magnesio, el óxido de magnesio y el sulfato de magnesio.

Citrato de magnesio

Es una de las formas más populares y mejor absorbidas, que se suele tomar por la mañana para mejorar la energía y el control del azúcar en la sangre. También tiene un efecto laxante, por lo que puede ayudar a combatir el estreñimiento.

Glicinato de magnesio

Esta unido a un aminoácido llamado glicina, que tiene propiedades calmantes y antiinflamatorias. Se suele tomar por la noche para mejorar el sueño y la salud muscular. Es una de las formas más suaves y menos irritantes para el estómago.

Cloruro de magnesio

Es una forma que se encuentra en el agua de mar y que se puede tomar en forma de comprimidos, polvo o solución. Tiene un efecto alcalinizante y desintoxicante, por lo que puede mejorar la digestión y la eliminación de toxinas. También puede ayudar a prevenir las infecciones y a fortalecer el sistema inmunitario.

Óxido de magnesio

Se obtiene por la combustión del metal magnesio. Es una de las formas más baratas y usadas de magnesio, pero también una de las menos absorbidas y más irritantes para el estómago. Se suele tomar como un suplemento de magnesio básico o como un antiácido.

Sulfato de magnesio

Se conoce popularmente como sal de Epsom y que se puede tomar por vía oral o aplicar de forma tópica. Tiene un efecto laxante, relajante y antiinflamatorio, por lo que puede aliviar el dolor muscular, el estrés y las hemorroides.

Sea cual sea el tipo de suplemento que se elija, es importante tomarlo con una comida para mejorar su absorción y evitar posibles efectos secundarios como náuseas, diarrea o calambres.

    También es conveniente consultar con un médico antes de tomar magnesio, especialmente si se tiene alguna condición médica o se está tomando algún medicamento, ya que este puede interactuar con algunos fármacos o alterar el equilibrio de otros minerales como el calcio, el potasio o el sodio.

    Fuente: glamour

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