El sexo es un aspecto fundamental en las relaciones de pareja, y si experimentas un deseo sexual mucho menor que tu pareja, debido al estrés, puede poner en riesgo tu relación.
Varias personas son capaces de lidiar con el estrés de forma sana, compartir sus sentimientos, pensamientos y dejar las responsabilidades de trabajo en el trabajo. No obstante, otros dejan que el estrés consuma por completo su mente, todo el tiempo del día, en situaciones plenamente inapropiados.
Podría ser difícil pensar en cualquier otra cosa (incluso las cosas buenas) una vez que se está consumido por el estrés. Es de esperar, que los pensamientos sobre el sexo logren ser colocados sin querer en un segundo plano.
Efectos del estrés en el cuerpo humano
«Una vez que se está estresado, puede sentirse físicamente mal», dice la proveedora de Talkspace Rachel O’Neill. “Es viable que no sienta un quiero sexual espontáneo o que responda mucho. Además, es viable que sencillamente sienta que el sexo es una cosa más que debería añadir a su lista de labores pendientes. Cada una de estas cosas tienen la posibilidad de ayudar a un sentimiento general de falta de sexo y desinterés en la actividad sexual «.
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Maneras de desestresarse antes del sexo
«Intente tener cualquier tipo de demarcación clara entre un día lleno de estrés y el resto del día», dice O’Neill. “Si ha tenido una jornada de trabajo estresante, intente tomar un poco de tiempo para relajarse antes de pasar a la siguiente fase de su día. Puede llegar a ser algo tan sencillo como una ducha o un baño, o quizás solo unos minutos de respiración tranquila y concentrada».
Permitirse este tiempo intencional para la higiene personal realmente puede marcar la diferencia en la manera en que se sentirá en el resto del día. Realice algo que sea relajante y enriquecedor para usted, algo que disminuya los niveles de estrés y sencillamente lo haga sentir bien. Esto puede ayudar su rutina diaria, independientemente de si el sexo está en la imagen o no.
Además, se podría hacer algo relajante que además funciona como un poco de juego previo sensual con su pareja. O’Neill dice: “¡El uso de un masaje y combinación de técnicas de respiración podría ser una gigantesca forma de hacer que el alivio del estrés sea grupal, y que podría servir de precursor para el incremento gradual del deseo sexual!”
Fuente: noticiasensalud
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