¡Quiero una pareja! es una frase que he oído frecuentemente, de amigas y clientes. De hecho, hace años yo misma la repetí muchas veces. Recuerdo esa sensación de anhelar el amor, de estar a la espera del ser que nos acompañará en nuestra vida. También recuerdo la frustración o tristeza al ver que el tiempo pasaba y no llegaba ese ansiado amor

Ahora, con esta «prueba superada» puedo sugerir lo que hay que hacer para que este deseo se convierta en una posibilidad real de construir una buena relación de pareja.

Imagen superior cortesía de Serhii Chernetskyi en Pixabay

El amor romántico es una de las experiencias que más contribuye a nuestra felicidad. Y cuando nos falta, mucho de nuestro tiempo, pensamientos y emociones están enfocadas en conseguir esa relación. Dependiendo de muchos factores, ese deseo puede convertirse en el centro de nuestra vida. A veces, en la prisa por lograr aquello que el corazón desea con tanta fuerza; el resultado puede ser, salir lastimado(a).

Prueba superada | De quiero una pareja a ¡tengo una pareja! – Imagen referencial cortesía de Małgorzata Tomczak en Pixabay

Cuando el «quiero una pareja» no es un deseo sino una necesidad

A veces sentimos que nuestra vida está un poco vacía y ciframos nuestras esperanzas de llenarla con eso que nos han repetido de «la media naranja». Si además tenemos una autoestima frágil, creemos que ese ser amado será quien le de un poco más de sentido a nuestra vida.

Así, en lugar de tener los ojos abiertos para mirar bien a la persona que llega a mi, estoy en lo que yo llamo «preventa». Me refiero al evento que hacen las emisoras de radio o TV, mostrando lo mejor de su programación para ser «comprada». Esto significa que estoy intentando demostrarle que soy lo suficientemente buena(o) para que se quede conmigo.

En mi experiencia son pocas las probabilidades de éxito cuando se elige a alguien desde la necesidad.

La elección de la pareja es el paso más importante para crear algo bueno. Pero si estoy más enfocada en que me elijan, que en mirar si esta persona tiene los atributos para que juntos creemos una relación, seguro pasaré por alto importantes comportamientos que luego afectarán su dinámica.

Los caminos para cambiar de quiero una pareja a ¡tengo pareja!

Como investigadora del comportamiento humano, he observado lo que la gente hace para atraer una pareja.

Algunas, deciden enfocarse en su físico, buscando hacerse tan atractivas como sea posible. Eso puede ir desde un tinte en el cabello hasta una liposucción, abdominoplastia o implantes mamarios.

En mi opinión, me parece maravilloso que como un reflejo del amor propio, se mejore la imagen. Pero cuando ese es el único foco, creo que pierde de vista el hecho de que se tiene mucho más para ofrecer como pareja que sólo un cuerpo o apariencia.

Prueba superada | De quiero una pareja a ¡tengo una pareja! – Imagen referencial cortesía de StockSnap en Pixabay

Más aún, si la relación se fundamenta más en lo físico que en cualquier otra cosa, le faltarán importantes ingredientes para hacer de ésta un sólido vínculo.

En otros casos, (la elección que tomé… y me fue muy bien!!!) el camino es el del autoconocimiento. Puede ser un camino más largo, pero en mi opinión más gratificante.

Desde mi experiencia personal he llegado a la conclusión que trabajar primero en mi para sentirme bien y completa conmigo, saber ¿Quién soy? ¿Qué quiero en la vida? me hizo feliz. Además tener claro ¿Qué quiero de una relación? ¿Con qué clase de persona me hace bien relacionarme? me dio la claridad para elegir bien.

Así mismo, fortalecer mi autoestima hasta sentir que soy valiosa, que es un regalo para el otro estar conmigo, que está bien ser yo, me hizo sentir y verme atractiva más allá de lo físico.

Tener pareja, ¿cuestión de suerte o de consciencia?

Si cuando lees todo lo anterior dices, pero ¿cómo elegir, si nadie o muy pocas personas se interesan en mi? realmente tienes un trabajo personal y de autoestima por hacer.

Si no te sientes bien en tu piel, si no crees que puedes atraer a alguien o que mereces a una buena persona a tu lado, hay camino por andar.

Para mi encontrar una pareja no es una cuestión de suerte, dinero o de cuán atractiva (o) te veas o sientas. Este asunto, tiene que ves más con la consciencia, autoestima y el conocimiento que tengas de ti. Si quieres recorrer este camino, entonces puedo apoyarte.

Imagen referencial cortesía de Adina Voicu en Pixabay

¡Vamos! Deja de repetir quiero una pareja y date cuenta que ¡Tú si puedes tener la relación amorosa que quieres!

Nota: Para más artículos sobre este y otros temas de la misma autora, también puedes visitar la web www.carlaacebeydesanchez.com

A tu salud…