En un mundo obsesionado con dietas de moda y rutinas de ejercicio extenuantes, la cultura coreana ofrece una perspectiva refrescante y holística para mantener un peso saludable. Los coreanos son conocidos por su apariencia esbelta y radiante, y la clave no reside en soluciones rápidas, sino en una combinación de hábitos arraigados en su tradición, estilo de vida y mentalidad.

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Alimentación consciente y balanceada: La base de la salud coreana

El primer pilar de la filosofía coreana para el bienestar es la alimentación consciente y balanceada. A diferencia de las dietas occidentales que se centran en la restricción de calorías, la dieta coreana se enfoca en la calidad y variedad de los alimentos.

El plato principal de una comida coreana típica está lleno de verduras fermentadas y frescas, como el famoso kimchi, que es un superalimento probiótico. Estos alimentos no solo son bajos en calorías, sino que también promueven una digestión saludable y un metabolismo activo. Además, el consumo de arroz al vapor, caldos ligeros y proteínas magras como el tofu y el pescado son esenciales.

La regla de oro es comer hasta el 80% de la saciedad, una práctica que evita el exceso y fomenta una mejor digestión.

El poder de los fermentados: Más allá del kimchi

Otro aspecto fundamental es el énfasis en los fermentados. El kimchi no es el único protagonista. La cocina coreana utiliza una gran variedad de alimentos fermentados como el gochujang (pasta de chile), el doenjang (pasta de soja) y el ganjang (salsa de soja). Estos alimentos, ricos en bacterias beneficiosas, mejoran la salud intestinal, fortalecen el sistema inmunológico y, lo que es más importante para el control de peso, ayudan a la absorción de nutrientes y a la eliminación de toxinas.

Un intestino sano es crucial para un metabolismo eficiente, y los coreanos han entendido esto durante siglos.

Actividad física integrada: Movimiento como estilo de vida

Más allá de la alimentación, la actividad física es una parte integral de la vida diaria, no una tarea tediosa. Muchos coreanos optan por caminar o usar la bicicleta como medio de transporte en lugar de depender del coche. Los parques y espacios públicos están llenos de gente de todas las edades haciendo ejercicio, desde caminatas ligeras hasta artes marciales como el taekwondo.

El concepto de «haengbok» (felicidad) está intrínsecamente ligado al bienestar físico. En lugar de ver el ejercicio como una obligación, lo ven como una forma de liberar el estrés y disfrutar de la vida. Las rutinas de estiramiento y el pilates también son muy populares, enfocándose en la flexibilidad y la fuerza del cuerpo, lo que contribuye a una figura esbelta y tonificada.

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Mentalidad y estilo de vida: Hábitos sostenibles para el bienestar a largo plazo

Un aspecto menos conocido, pero igualmente importante, es el estilo de vida y la mentalidad. La cultura coreana valora la disciplina y la perseverancia, cualidades que se reflejan en su enfoque hacia la salud. Las rutinas de cuidado personal, que van desde el cuidado de la piel hasta la atención a la nutrición, se consideran una inversión a largo plazo en uno mismo. No se trata de lograr resultados instantáneos, sino de construir hábitos sostenibles.

El concepto de comunidad también juega un papel crucial; las comidas a menudo se comparten en familia o con amigos, lo que fomenta la conexión social y reduce el riesgo de comer por ansiedad o aburrimiento.

Bienestar mental: Componente esencial para un peso saludable

Finalmente, el cuidado del bienestar mental es tan importante como el físico. El estrés crónico puede llevar al aumento de peso, y los coreanos lo combaten con prácticas como la meditación, el yoga y la conexión con la naturaleza.

El hwan-gyeong (ambiente) y el jung-gyeong (respeto) son valores que promueven un estilo de vida más tranquilo y consciente.

En conclusión, el secreto coreano para mantener un peso saludable no es un truco mágico. Es una combinación de una dieta equilibrada rica en fermentados, una actividad física constante y un estilo de vida consciente que valora la disciplina y el bienestar mental. Es una filosofía que nos invita a dejar de buscar soluciones rápidas y a adoptar un enfoque más holístico y sostenible para la salud.

Fuente: glamour

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