La hernia inguinal es una afección que ocurre cuando una parte del intestino o tejido abdominal se debilita y sobresale a través de un punto débil en la pared abdominal inferior. Aunque no siempre es grave, la hernia inguinal puede causar molestias e incluso complicaciones mayores si no es tratada.
La causa principal de este padecimiento es un defecto en la pared abdominal inferior. Esta deficiencia puede ser congénita (presente desde el nacimiento) o adquirida a lo largo de la vida. Algunos factores que pueden aumentar el riesgo de desarrollar una hernia inguinal son los antecedentes familiares, esfuerzo físico intenso, estreñimiento, sobrepeso y tos crónica.
Síntomas que no debes ignorar
Protuberancia visible o palpable en la ingle: Esta protuberancia puede aumentar de tamaño al toser, hacer esfuerzo físico o estar de pie durante largos períodos.
Dolor o molestia en la ingle: El dolor puede ser leve o agudo, y puede empeorar al realizar determinadas actividades físicas como correr.
Sensación de ardor o quemazón en la ingle: Puede ser intermitente o constante.
Debilidad o pesadez en la ingle: Puede ser más evidente al levantar objetos pesados o al realizar actividades que requieren un esfuerzo abdominal intenso.
Náuseas o vómitos: En algunos casos, la hernia inguinal puede causar náuseas o vómitos, especialmente si la protuberancia es grande o está incarcerada
Tipos de hernia inguinal
Existen dos tipos principales:
- Indirecta: Este tipo de hernia se produce cuando el tejido abdominal protruye a través del canal inguinal, que es un conducto natural en la ingle por donde pasan los vasos sanguíneos y el cordón espermático en los hombres.
- Directa: Esta hernia es generada cuando el tejido abdominal sobresale a través de una zona debilitada de la pared abdominal inferior, fuera del canal inguinal.
Pronóstico, diagnóstico y tratamiento
El pronóstico de la hernia inguinal es generalmente bueno. En la mayoría de los casos, la hernia se puede reparar con éxito mediante una cirugía. El diagnóstico generalmente se realiza mediante un examen físico. En algunos casos, se pueden realizar pruebas de imagen, como una ecografía o una tomografía computarizada, para confirmar esta patología.
La cirugía puede realizarse de forma abierta o laparoscópica, este procedimiento consiste en realizar una incisión abierta en la ingle para reparar la hernia. La cirugía laparoscópica consiste en realizar pequeñas incisiones en el abdomen a fin de revertir el problema.
Lea también: Hernia discal: ¿Qué es? ¿Que la causa? ¿Qué tratamientos hay para curarla? por Francis Lugo
Prevención
No existe una forma segura de prevenir la hernia inguinal. Sin embargo, se puede reducir el riesgo de desarrollar una hernia inguinal manteniendo un peso saludable, evitando el esfuerzo físico intenso y tratando el estreñimiento y la tos crónica.
Si notas una protuberancia en la ingle, es importante que consultes a un médico para obtener un diagnóstico preciso y recibir el tratamiento adecuado.
Imagen referencial: Pexels
Fuente: WebConsultas
Cuenta con una valiosa trayectoria en el mundo editorial para productos impresos y digitales participando en los procesos de corrección, edición e investigación.
