Los individuos con síndrome de Cotard (también denominado delirio de Cotard) creen que faltan partes de su cuerpo, que están muriendo, que están muertas o que no existen. Tienen la posibilidad de pensar que no existe nada.

El síndrome de Cotard es raro, ha sido descrito como una enfermedad psiquiátrica relacionada con la hipocondría, con unos 200 casos conocidos en el mundo

Aunque los indicios son extremos, la mayor parte de los individuos mejoran con tratamiento médico.

Síndrome de cotard (1)
Foto referencial de Joyce Dias en Pexels

Síntomas

Los individuos con este síndrome comúnmente se tornan menos sociables. Algunas veces, tienen la posibilidad de dejar de dialogar por completo. Algunos escuchan voces que les aseguran que permanecen muertos o moribundos.

Otros tienen la posibilidad de negarse a ingerir alimentos (porque, entre otras causas, no le ven ningún sentido debido a que permanecen «muertos»). También, tienden a la posibilidad de intentar hacerse daño a sí mismos.

Los pacientes llegan a creer que sus órganos internos se hallan paralizados o disfuncionales, (por ejemplo, su corazón no late) e inclusive que se están pudriendo, llegando a exponer ciertas alucinaciones olfativas que aseguran su delirio.

En sus formas más complicadas, el paciente llega a defender la iniciativa de que realmente él mismo está muerto e inclusive que han fallecido personas allegadas a él.

En un caso bien documentado de síndrome de Cotard expuesto en 2008, una dama de 53 años ha sido ingresada al centro médico luego de que su familia llamara al 911. Mencionaron que la dama creía que estaban muertos y olían a pescado podrido. Además, la dama solicitó que la llevaran a una morgue pues querían estar con los muertos.

Causas

No queda claro qué causa el síndrome de Cotard. Entendemos que constantemente es un síntoma de un problema de salud más profundo que perjudica al cerebro, como:

  • Demencia
  • Encefalopatía (una patología en la que un virus o una toxina perjudica el manejo de su cerebro)
  • Epilepsia
  • Migraña
  • Esclerosis múltiple
  • Enfermedad de Parkinson
  • Sangrado fuera del cerebro consecuencia de una lesión cerebral grave

Ciertos profesionales creen que el síndrome de Cotard es el resultado de 2 tipos de mal cerebral. El primero cambia la manera en que los individuos se ven a sí mismas. El segundo les hace continuar creyendo en esta perspectiva falsa, inclusive una vez que se les muestra que no es verdad.

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¿Quién podría padecer el síndrome de Cotard?

El síndrome de Cotard puede pasar a casi cualquier edad, aunque perjudica a bastantes personas de 50 años. La mayoría de personas que la sufren además poseen antecedentes de inconvenientes de salud psicológica, en especial:

  • Depresión
  • Ansiedad
  • Esquizofrenia
  • Abuso de sustancias

El grueso de pacientes tiene cualquier tipo de mal cerebral que se declara en las pruebas de imagen (tomografía). El daño puede provenir de:

  • Un golpe
  • Un tumor
  • Un coágulo de sangre
  • Una herida

Además, el síndrome de Cotard puede provocar trastorno bipolar en jóvenes y adultos adolescentes.

Posibles tratamientos

Los doctores poseen muchas maneras de intentar el síndrome de Cotard. El enfoque común es intentar el problema médico que lo está ocasionando.

A la mayor parte de los individuos les va mejor con una mezcla de medicamentos y una forma de terapia de conversación, como la terapia cognitivo-conductual (TCC) o la psicoterapia. Los dos brindan un espacio seguro para que los individuos hablen respecto a cómo se sienten y les ayudan a hallar maneras más saludables de pensar y actuar.

Los medicamentos usados para intentar el síndrome de Cotard integran:

  • Antipsicóticos
  • Medicamentos ansiolíticos
  • Antidepresivos

Si los medicamentos y la psicoterapia no ayudan, la terapia electroconvulsiva (TEC) es una elección. Envía pequeñas descargas eléctricas por medio del cerebro. Esto cambia la química del cerebro y puede remover ciertos indicios de salud psicológica.

La TEC puede ocasionar efectos colaterales como pérdida de memoria y confusión. Por esa razón, es un último recurso.

Fuente: azsalud

Imagen destacada por: pixabay

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