Las flexiones permanecen entre los ejercicios más practicados de todos los tiempos. Esto se debería a que son un entrenamiento primordial e importante si tu objetivo es trabajar el cuerpo completo, por lo cual su práctica es común tanto en una clase de enseñanza física en la primaria, como en una rutina de deportistas de elevado nivel
Para varias personas, las flexiones resultan muy sencillas de hacer. No obstante, para otras, se puede tornar imposible, puede que por falta de fuerza o ya que nace un dolor repentino en una región corporal. Si te sientes dentro del segundo grupo, te ofrecemos ciertos ejercicios que puedes hacer para trabajar brazos, extremidades, vientre y glúteos para que reemplaces las flexiones.
Planchas
Las planchas son una de las mayores posibilidades para sustituir a las exitosas flexiones ya que fundamentalmente te ayudan a ejercitar todo el cuerpo. Lograrlas además podría ser difícil. Sin embargo, implica menos desplazamiento de los brazos y más control del vientre, por lo cual es factible que resulte más simple que una flexión.
Esta es ideal para edificar la fuerza esencial para las lagartijas, fortalecen el vientre y los brazos, además de que está comprobado que tienen la posibilidad de ayudarte a mejorar ¡hasta tu concentración!
Ejercicios con bandas de resistencia
Las bandas flexibles se han convertido en un componente de entrenamiento elemental para muchas disciplinas y deportes. Las ventajas que aportan son varios, como un menor peligro de lesión, lograr movilidad articular, aliviar los dolores por sobrecarga y ajustarse a las diferentes resistencias de cada ejercicio.
Si lo que estás intentando encontrar es robustecer el tren superior e inferior de tu cuerpo, hacer extensiones de brazos y extremidades con bandas de resistencia podría ser tan efectivo como las lagartijas. ¿La razón? Te ayudarán a tonificar brazos, espalda, muslos, pantorrillas y glúteos.
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Levantamiento de pesas
Reemplazar las flexiones de pecho y añadir pesas a tu entrenamiento es viable. Las mancuernas o barras te ayudan a concentrar el desplazamiento en partes específicas de tu cuerpo. Lo recomendables es que comiences realizando repeticiones con poco peso y de allí vayas creando resistencia poco a poco.
Al conservar unos músculos fuertes conseguimos una mejor ejecución de desplazamiento gracias a una buena postura. Los ejercicios de fuerza mejoran la densidad ósea, reduciendo de esta forma el viable peligro de osteoporosis o fracturas y salvaguardando a la vez nuestras propias articulaciones.
Yoga y pilates
Tanto el yoga como el pilates tienen la posibilidad de ser practicados por personas de cada una de las edades y condiciones físicas. Al ser un ejercicio de bajo efecto, tienen la posibilidad de hacerlo desde chicos a personas más grandes. En esta última franja de edad es inclusive aconsejable, para luchar contra la perdida de movilidad y los inconvenientes musculares de la edad.
Si tu condición física no es la óptima, tampoco te preocupes; debido a que su baja magnitud dejará que los ejercicios se adapten a todos esos que no se encuentren acostumbrados a hacer ejercicio. Con el paso del tiempo comenzarás a ver los resultados, e inclusive tendrás la posibilidad de perder aquellos kilos de más que te molestan.
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