Febrero, mes de la prevención del cáncer, nos invita a reflexionar sobre la importancia de adoptar una vida saludable para reducir el riesgo de esta enfermedad. El doctor Juan Celis, internista y oncólogo, nos comparte su experiencia y conocimientos sobre cómo un estilo de vida equilibrado puede disminuir hasta en un 30% las probabilidades de desarrollar cáncer.

En un mundo saturado de información contradictoria, el doctor Celis enfatiza la necesidad de individualizar el cuidado de la salud. Cada persona es única y requiere un enfoque personalizado que considere sus necesidades y preferencias. Más allá de las recomendaciones generales, la consulta con un médico y un equipo multidisciplinario es fundamental para diseñar un plan de vida saludable y adaptado a cada individuo.

Imagen de Silvia en Pixabay

Hábitos saludables para prevenir el cáncer

  • Abandono del tabaco: El tabaco es un factor de riesgo significativo para diversos tipos de cáncer, incluyendo pulmón, colon y vejiga. Dejar de fumar reduce el riesgo de cáncer y mejora la efectividad de los tratamientos oncológicos.
  • Alimentación equilibrada: Evitar carnes procesadas, embutidos y alimentos enlatados, ya que se asocian con un mayor riesgo de cáncer de colon y otros tipos de cáncer. Priorizar el consumo de frutas, verduras, granos integrales y proteínas magras.
  • Actividad física regular: El ejercicio físico ayuda a mantener un peso saludable, fortalece el sistema inmunológico y reduce el riesgo de diversos tipos de cáncer.
  • Manejo del estrés: El estrés crónico puede debilitar el sistema inmunológico y aumentar el riesgo de enfermedades, incluyendo el cáncer. Buscar actividades que promuevan la relajación y el bienestar emocional.
  • Descanso adecuado: Dormir lo suficiente es fundamental para la salud física y mental. Durante el sueño, el cuerpo se repara y regenera, lo que fortalece el sistema inmunológico.
  • Moderación en el consumo de alcohol: El consumo excesivo de alcohol se asocia con un mayor riesgo de diversos tipos de cáncer.

Lea: El cáncer de mamá y estilo de vida

La importancia de la prevención

Adoptar un estilo de vida saludable no solo reduce el riesgo de cáncer, sino que también mejora la calidad de vida y el bienestar general. La prevención es una inversión en salud que nos permite disfrutar de una vida plena y activa.

El doctor Celis nos recuerda que la disciplina y el equilibrio son claves para mantener hábitos saludables a largo plazo. No se trata de eliminar por completo los placeres de la vida, sino de aprender a moderarlos y a tomar decisiones conscientes sobre nuestra salud.

En definitiva, la prevención del cáncer está en nuestras manos. Al adoptar hábitos saludables y mantener una actitud proactiva hacia nuestra salud, podemos reducir significativamente el riesgo de esta enfermedad y disfrutar de una vida más larga y saludable.