La higiene del sueño en la tercera edad es parte de la salud integral del adulto mayor, pero conforme avanza la edad los hábitos del sueño suelen cambiar; por lo que es importante saber programar las horas de sueño.
El Neurólogo Claudio Cárdenas, Especialista en Sueño, explica los factores que hay que tomar en cuenta para mejorar el estado del sueño y bienestar del adulto mayor.
Le higiene del sueño en la tercera edad y el reloj biológico
Los adultos de edad avanzada son por lo general los primeros en levantarse, como haciendo voto al aforismo popular ‘al que madruga, dios a lo ayuda’. Esto puede hacer pensar que sus horas de sueño se han reducido, pero no es así.
En realidad, «el tiempo que duermen en el día es similar al de los adultos, es de 7 horas». Añade el Especialista en Sueño que, en el caso del adulto mayor «su reloj biológico les pide 1 o 2 siestas en el día», que si se suman con las horas de sueño nocturno, harían 7 horas.
La distribución de horas de sueños en las personas de la tercera edad, a lo largo del día, hace que las de la noche sean cortas. Alrededor de 6 horas.
Hay que considerar, por ejemplo, que los adultos mayores «se duermen temprano y se despiertan en la madrugada». No es que sufran de insomnio «es que ya cumplieron su cota de sueño», aclara el experto en sueño.
Modificar hábitos en la tercera edad para lograr un mejor sueño
Las siestas
Las siestas deben ser parte de la higiene del sueño en la tercera edad. Indica en este sentido el Dr. Cárdenas que hay que «normalizarlas». Ya que el sueño a estas edades se hace «polifásico», contrario al sueño ·»monofásico», que es de una sola noche.
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En el sueño polifásico del adulto mayor, «el cuerpo le pide muchas veces una siesta a media mañana, si se despierta muy temprano, o, a media tarde, a veces después del almuerzo». Recomienda el especialista que las siestas sean programadas, durando un tiempo determinado, para que las horas de la noche se vean menos reducidas.
Estimular el sueño
Las variables fisiológicas en la tercera edad entran en juego en lo que a la calidad del sueño se refiere. Señala el Dr. Cárdenas que la glándula pineal «que es responsable de liberar la melatonina, según las señales del ojo, que dice qué tanta luz y qué tanta oscuridad recibe, a veces se calcifica».
Esto hace que la liberación de melatonina disminuya y, por lo tanto, «hay que, a veces, aumentar los estímulos que hacen que esa melatonina se libere de manera importante en la noche, y se deje de liberar en la mañana».
Más luz natural
La exposición a la luz solar es un elemento, en este caso, a considerar, ya que muchas personas de la tercera edad permanecen recluidas en sus casas sin exponerse a la luz natural, provocando que «el reloj de la melatonina se desorganice un poco».
Meno luz luz artificial
Muchos adultos mantienen durante la noche artefactos encendidos, como la Tv, las computadoras, así mismo los bombillos. Todo esto afecta la higiene del sueño en la tercera edad. «Y a veces provoca que en la noche el pico de la melatonina alta ,que debería ocurrir, baja».
Llevar una vida activa para tener una mejor calidad del sueño en la vejez
Las actividades físicas y/o intelectuales durante el día abonan a un mejor sueño durante la noche. Recomienda este neurólogo venezolano que al adulto «hay que incorporarlo a las actividades de la casa», porque ayudará a que logre conciliar mejor el sueño.
Mientras el adulto mayor lleve una vida sedentaria donde no esté presente el ejercicio intelectivo, para resolver actividades cotidianas, y por el contrario lleve una vida excesivamente pasiva, todo esto, al final del día, entorpecerá la higiene del sueño en la tercera edad.
