Alguna vez escuchaste, seguramente, que comer zanahorias ayuda a las personas a ver en la oscuridad. Esta creencia es popular en el Reino Unido; sin embargo, es probable que hayas sido engañado por un grupo de ingleses en la década de 1940.
Según el relato histórico, la Royal Air Force tuvo éxito frustrando a la fuerza aérea alemana porque los funcionarios comían muchas zanahorias; por lo tanto, los espías de Adolf Hitler no tenían que preocuparse por los avances británicos en la tecnología del radar. Entonces, eso fue una campaña publicitaria para desviar la atención de los alemanes.
El objetivo era hacer creer que las zanahorias le daban a los soldados visión nocturna. Después de la caída de Francia, en 1940, estos estaban solos y aislados del imperio por los submarinos alemanes. La alimentación de los soldados, fundamental para mantenerlos de pie, era cada vez más difícil conseguir.
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Sin embargo, el clima británico favorecía el cultivo de zanahoria. El consumidor británico no estaba acostumbrado a comer este vegetal, y se consideraba comida «de pobres y marginales».
Durante la guerra, la producción de este vegetal se disparó en un 300%. De esta forma, el gobierno encontró que cultivar este alimento era muy necesario; comenzó a producir las zanahorias, que al cultivarse en el país, no podían caer en manos enemigas.
Para la estrategia de motivar el consumo de la zanahoria, comenzaron a repetir una «mentira piadosa». Así, se publicaron carteles de las propiedades de la zanahoria, vinculándolas al éxito de la aviación británica. En realidad, estos pilotos fueron tan efectivos que comenzaron a ganar popularidad.
Ricas en antioxidantes
Pero como en la mayoría de las falsedades, había algo de verdad en la campaña. Las zanahorias tienen niveles altos de betacaroteno y luteína, antioxidantes usados por el cuerpo para producir la vitamina A.
Esta ayuda al ojo a convertir la luz en una señal que puede enviarse al cerebro, para procesar imágenes en situaciones de poca luz. De esta forma, sí ayudan a la visión a mejorar, sin embargo, no da «visión nocturna».
Los científicos comenzaron las investigaciones para determinar si este alimento podía mejorar la visión de los pilotos, pero no descubrieron nada importante.
En 1941, un avión británico realizó un aterrizaje en Francia; los alemanes salvaron los restos, descubriendo la tecnología de ese país que cayó en manos de los soldados de Hitler.
