Mucho se ha escrito sobre los beneficios de la meditación al integrarlo a nuestra vida diaria. Pero, ¿qué se puede esperar si lo integramos a una de las instituciones más importantes de cualquier sociedad, que son las educativas?  

Afortunadamente varios países ya implementaron la meditación en el aula con muy buenos resultados.

Imagen superior cortesía de Honey Kochphon Onshawee en Pixabay 

En este contexto, el uso de la meditación puede ser un recurso que complemente el desarrollo de habilidades de aprendizaje y por ende el rendimiento académico de niños y adolescentes, pudiendo incorporarse en cualquier clase o asignatura. Anecdóticamente, algunos profesores también informan  que su enseñanza mejora cuando cultivan una conexión  con  el momento presente en la clase.

Meditación en el Aula
Imagen de Tumisu en Pixabay

La meditación generalmente puede mejorar el clima del aula. Sin embargo, uno de los grandes desafíos para la formación de la meditación  en las escuelas, por supuesto, es cómo captar el interés y la atención de las mentes jóvenes. Que se distraen de manera aún más constante e intensa con los teléfonos móviles, el hambre, la moda, la popularidad, etc., que las mentes de un adulto.

 Existen investigaciones que demuestran que los alumnos consiguen estar mas concentrados, al aprender a relajarse.

Beneficios de la meditación en el Aula escolar:

1. Promueve el Aprendizaje

En general, la meditación aumenta la capacidad de concentrarse durante períodos de tiempo más prolongados,  lo que beneficia a los estudiantes de muchas maneras, incluyendo el hecho de poder prestar atención en clase por más tiempo y mejorar así la retención de contenido.

2. Colabora con el manejo de las emociones

Los expertos han establecido firmemente la relación entre el desequilibrio emocional y los resultados desfavorables en la escuela. La meditación colabora en el manejo de sus emociones y así desarrollar una Inteligencia Emocional, tan necesario para su vida adulta. Esto repercute de manera positiva en sus resultados académicos. 

3. Mejora la atención

Mejora la atención de los niños y reduce los problemas de internacionalización, como pueden ser el temor, la no integración a los grupos sociales. 

4. Reduce el estrés

La meditación brinda a los niños un tiempo de inactividad muy necesario para descansar física, mental y emocionalmente.

Mejoras comprobadas según la práctica

Desde La Fundación David Lynch Centro de Salud y Bienestar, aseguran que han obtenido los siguientes logros mediante la implementación continuada de la práctica de la meditación en aulas:
  • Mejora del 10% en las puntuaciones en exámenes.
  • Aumento de la creatividad.
  • Mayor retención de maestros y menor estrés laboral.
  • Mayor felicidad, concentración y autoconfianza.
  • Reduce de los síntomas del Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH) y los síntomas de otros trastornos del aprendizaje.
  • Reducción del 86% de suspensiones en dos años.
  • Reducción del 40% de trastornos psicológicos, como el estrés, la ansiedad y la depresión.
  • Disminución del 65% en los conflictos violentos en dos años.
Imagen de Petra en Pixabay

Otorgar a los alumnos un tiempo en donde  puedan relajarse mentalmente es fundamental para mejorar sus comportamientos. Teniendo en cuenta que los niños y jóvenes a menudo están bajo situaciones de estrés, la meditación es una forma de que se reúnan y centren sus pensamientos.

Sin ninguna duda, dedicar un tiempo  para detenerse y meditar es positivo, tanto para los estudiantes como para los profesores que también experimentan situaciones de estrés en su cotidianidad.

A tu salud…