El neurotransmisor dopamina es conocido popularmente como la hormona de la felicidad, debido a que segrega sustancias capaces de hacer sentir felices a las personas.
Hasta entonces nadie discutía que esta hormona, que junto a la serotonina, que brinda sosiego y tranquilidad a las personas, se activara por si sola en el organismo. Pero un reciente estudio parece indicar que la dopamina la podemos activar cuando a voluntad propia. ¿Qué tan cierto esto? Sigue leyendo para saber más.
Entrenar el cerebro para segregar dopamina
Imaginar que el neurotransmisor dopamina puede ser activado como y cuando se quiera, es casi que la piedra filosofal de la alegría. Porque estar alegre y feliz sería un capricho, o una opción a la que recurrir en cualquier momento del día.
Aunque suene surreal, los ratones pueden segregar dosis de dopamina cuando así lo deseen. De allí que un grupo de científicos se haya embarcado en una serie de ensayos para probar que el ser humano al igual que los ratones, puede activar dopamina en su organismo por propia determinación.
El neurotransmisor dopamina qué hace?
Es uno de los tantos neurotransmisores del organismo que actúan como regulador del mismo. Está relacionada con los estados de ánimos, y esto, de manera importante.
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La dopamina está entre los neurotransmisores más estudiados; llamado también hormona de la felicidad, por proveer sensaciones placenteras y estados psicológicos de confort, comparte estas facultades junto a la serotonina y la endorfina.
Allí donde hay placer hay dopamina
Pero el neurotransmisor dopamina también es responsables de las conductas adictivas, ya que al proporcionar placer debido a interacciones externas que tiene un individuo, este buscará interactuar con aquello que estimuló la sensación de recompensa o ganancia, que se obtiene de la segregación de dopamina.
Se ha creído que la dopamina es algo que se genera en el organismo humano por factores externos, de manera casual; como encontrar o comer algo que genera placer. Y que no depende del control humano que esta se produzca, sino cuando se obtiene un estimulo externo, como comer chocolate.
Ratones felices
Un grupo de investigadores que en colaboración con la Universidad Monte Sinaí de Nueva York han concluido en que los ratones segregan la hormana de la felicidad, dopamina, cuando deseen.
Con ratones de laboratorios hicieron el experimento de darles una recompensa por cada actividad que les pusieran. La sorpresa de los científicos es que los ratones no solo segregaban el neurotransmisor dopamina por factores internos, sino también a voluntad propia, sin condicionamientos del exterior.
Fuente: SAberVivirTv
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