Si estás permanentemente cansada y somnolienta, sientes frío, tienes dificultad para concentrarte, olvidas las cosas y te sientes deprimida; o por el contrario, si tienes calor, palpitaciones e incluso temblores; o estás irritable y sufres de insomnio; si has perdido o ganado mucho peso en poco tiempo, si se te cae el cabello, si tienes la piel seca y las uñas escamadas o presentas hinchazón en cara y manos, puedes tener problemas de tiroides.

Imagen superior de cookie_studio en Freepik

¿Qué es la tiroides?

Esta glándula de apenas 25 gramos en forma de mariposa, está ubicada en el cuello. Es capaz de hacerte gozar, o padecer un montón de cosas; y alterar, desde la cantidad de glóbulos rojos de la sangre, hasta el valor del colesterol, suscitando los cambios más extremos en el organismo.

Cuando la tiroides no funciona correctamente puede ser por falta de iodo. Esto le impide fabricar las hormonas que debe producir (la tiroxina (T4) y la triyodotironina (T3)). O porque la encargada de estimularla para que funcione (la glándula hipófisis con su hormona TSH) tiene algún desperfecto y deja de hacerlo. También puede suceder que sea atacada por los anticuerpos, como si se tratara de un cuerpo extraño (lo que se conoce como Tiroiditis de Hashimoto o Autoinmune).

“Existe una relación directa entre la alimentación y la síntesis y utilización de las hormonas tiroideas; las deficiencias nutricionales y la sobrecarga de sustancias tóxicas en el organismo son los principales implicados en el desarrollo del hipotiroidismo” afirmó la doctora Margarita Botero, especialista en obesidad y medicina antienvejecimiento del Centro Médico Antienvejecimiento.

Tiroides
Imagen de Freepik

¿Qué se recomienda?

La especialista recomienda la nutrición ortomolecular. Está basada en el uso de dosis muy altas de vitaminas, minerales, enzimas, antioxidantes, aminoácidos, ácidos grasos esenciales y fibra dietética, entre otras. “Es muy importante mantener una alimentación equilibrada, con una alta ingestión de vegetales frescos. Y evitar aquellos alimentos que actúan como supresores de la tiroides y estimulantes como azúcar, café y cigarrillo”, comentó.

La dieta se complementa con sueros metabólicos, que están cargados de aminoácidos como la tiroxina, la vitamina A y oligoelementos como el selenio. “Estos sueros ayudan a que el paciente tenga un metabolismo más rápido, a que esa tiroides responda en la producción de T3 y T4 por medio de la TSH”, explicó la Dra. Botero.

Otro factor que juega un papel importante en el desarrollo del hipotiroidismo es el estrés, por su efecto en las funciones químicas del organismo, con el consiguiente desequilibrio. La recomendación es dormir ocho horas diarias y practicar ejercicios como el yoga, que ayudan a mejorar la respiración, fomentar la concentración y manejar el estrés adecuadamente.

Algunas terapias complementarias pueden contribuir al manejo del hipotiroidismo; como la hidroterapia iónica (pediluvio) para detoxificar y desintoxicar el organismo; terapias neurales celulares y el uso de factores autólogos (plasma rico en plaquetas) para combatir la flacidez, ya que el paciente con problemas de tiroides suele presentar deficiencia de colágeno.

Tiroides
Imagen de stefamerpik en Freepik

 “El hipotiroidismo es una enfermedad crónica; que no se quita, pero que puede estabilizarse y manejarse con hormonas, conjuntamente con algunas terapias alternativas, como las que ofrecemos en nuestra consulta”, finalizó Botero.

@energiavitalactiva

A tu salud…